La "llevo" en la sangre pero tardé en conocerla. SEVILLA. Una ciudad con color especial. Un lugar para vivirlo, disfrutarlo, sentirlo...un rincón que me enamora.
En estos días de puente he tenido la oportunidad de pasear por las calles de esta maravillosa ciudad y en Navidad es simplemente grandiosa.
En cada esquina el olor a incienso te recuerda que estas en Andalucía. Tuviste la suerte de caer en esta tierra!!
En cada una de las visitas a la capital andaluza encuentro algo nuevo. Parece ser una caja continua de sorpresas.
Mi último descubrimiento ha sido la "seta" mirador que se encuentra en la Plaza de la Encarnación. Gran obra. La entrada cuesta unos dos euros y realmente merecen la pena.
¡¡Ver Sevilla desde arriba es una pasada!!
Ya sabéis, visita casi obligada cuando paséis por Sevilla.
No hay duda que Sevilla
por su aroma y su belleza,
de la tierra y su grandeza
es la octava maravilla.
Es como un jardín florido
con perfume de azahares
y sonido de cantares
que embrujan a los sentidos.
Antonio Pardal
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